El Orfeón cumple este año 125 años de actividad coral ininterrumpida y de pasión por la música y dedicación profesional a pesar de su espíritu amateur.
El sábado 14 de mayo el Orfeón Donostiarra organiza un concierto en la Basílica de Aránzazu, Oñati, con motivo de su 125 aniversario. Este concierto extraordinario contará con la participación del coro y del organista Gerardo Rifón bajo la dirección de José Antonio Sainz Alfaro.
Para celebrar esta efémeride y en este primer concierto conmemorativo, el coro ha elegido un programa al órgano muy atractivo que incluye las siguientes obras:
AITA GUREA (Aita Madina)
AVE MARÍA (Tomás Aragüés Bernad)
NIGRA SUM (Pau Casals)
HALLELUJAH (Leonard Cohen)
Juncal Baroja, solista
LITANIES À LA VIERGE NOIRE (Francis Poulenc)
MISA BENEDICTA (Tomás Garbizu)
En 1956, coincidiendo con la inauguración de la nueva Basílica del Santuario de Arantzazu, la comunidad de franciscanos convocó dos concursos de composición: uno de Poemas Sinfónicos y otro de misas. Tomás Garbizu obtuvo el accésit con esta obra dentro del certamen.
LÉLIO OU LE RETOUR À LA VIE (Hector Berlioz) “Choeur d’ombres”
“RESURRECCIÓN” Final de la 2ª Sinfonía (Gustav Mahler) “Mit flügeln”
Las entradas ya están a la venta desde el martes 26 de abril en la plataforma on line: https://tickets.kutxabank.es a un precio único de 20 euros. El mismo dia del concierto se podrán adquirir en el acceso a la basílica, en función de la disponibilidad.
El coro prevé la celebración de más actos a los largo del 2022, pero aún está preparando dicha efeméride que se ha visto afectada por la pandemia.
Fundado en 1897, el Orfeón Donostiarra une a su larga trayectoria el prestigio de ser considerado como la más importante agrupación coral de España y de Europa. Su repertorio abarca un centenar de obras sinfónico-corales, más de cincuenta títulos de ópera y zarzuela y gran número de obras de folklore y polifonía.
Su director desde 1987 es José Antonio Sainz Alfaro, a quien precedieron Secundino Esnaola, Juan Gorostidi y Antxon Ayestarán.
A pesar de conservar su espíritu amateur inicial, el Orfeón tiene una dedicación profesional, con una media de 35 a 40 conciertos por año. Participa con asiduidad en los festivales de música más importantes de España. Ha sido incondicional de la Quincena Musical de Donostia, que en 1997 le otorgó su Medalla de Oro. También el Festival de Granada le entregó ese mismo año su medalla por “la relevancia artística y profesional y por la larga vinculación” a este certamen. En el Festival de Santander ha intervenido en numerosas ediciones hasta la fecha. También ha participado de forma regular en el de Canarias, en el que clausuró las ediciones de 2007 y 2008 bajo la dirección de Rattle y Muti respectivamente, y en los festivales de Peralada, Soria y Cuenca. Asimismo, participa en festivales europeos tales como Los Proms londinenses, Lucerna, Ruhr-Triennale o Salzburgo, así como en ciudades como Rotterdam, Toulouse, París o Frankfurt.
El Orfeón donostiarra cuenta con numerosas condecoraciones y premios entre los cuales destaca el Premio Príncipe de Asturias de la Artes en 1984 y el Vasco Universal en 1997 con motivo de su centenario.
